29.9.04

Luto fotográfico

Llevé mi cámara, descompuesta en el aeropuerto hace como seis meses, al taller que me recomendaron. Todos se veían muy profesionales cuando llegué. Tomaron los datos de mi cámara y la abrieron. Me dijeron desde entonces que era difícil, que ya era muy viejita, que la última reparación por la que había pasado - en Guadalajara, con uno de los "mejores especialistas", supuestamente - era terrible. Le habían metido taladro.

Tengo junto a mí el cadáver de mi hermosa Minolta XGA. Me la regaló mi papá cuando comencé a estudiar foto. Era una belleza. Y ahora lloro.

En realidad, es irremplazable... pero si alguien sabe de una buena cámara manual no demasiado cara, por favor, no dejen de avisarme. Snif.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En este mundo digitalizado es raro encontrar a alguien que aprecie los artefactos manuales. Si sé de alguna cámara, te aviso.