12.1.09

Sensación de soundtrack

Hay gente que puede conducir en silencio o escuchando las noticias. No se quejarían nunca de tener un coche como el único que he tenido yo, sin radio. Y pensar que ahora me parece imposible un viaje sin música.

No sé si sea por la sensación tan cinematográfica que dan las ventanas de los automóviles - o de los trenes para el caso - pero hay algo que me dice que se necesita música para viajar. Si algo me gusta de los autoestéreos o ahora del iPod (y en su momento de mi inseparable walkman) es que te dan la posibilidad de, en el viaje, ir más lejos. Alejarte aún más, cortesía de la música que estás escuchando.

No sucede siempre. En realidad, son pocas las veces en las que de pronto todo encaja: la panorámica a través de la ventana, la letra de la canción que escuchas a un cierto volumen, el ritmo de su música, la compañía en la que estás. Así sea contigo mismo. Pero en ese momento, en ese par de minutos - no más - parece que todo es cierto: que eres más esperado que el verano, más ancho que la noche, más cierto que el té con azúcar. Por un momento, parece que todo encaja y que la película que imaginas no está pasando en el cine, no tiene un guión que desconoces.

Está aquí. Es lo que estás viviendo hoy. Eres tú.

Para mí, la capacidad de abstraerse en ese momento, en ese instante y pensar que todo es perfecto, es la felicidad. Y confirmo que el "estar feliz" no es una situación de permanencia: es un estado de gracia, que sólo llega en microdosis y que en retrospectiva, te permite seguir caminando.

Ahora, regreso a casa. Por supuesto, con los audífonos puestos.

1 comentario:

JULY dijo...

sí, exactamente eso me ha pasado y es super divertido. Siento que hasta todo corre en cámara lenta mientras voy escuchando la música, así, hasta en plan mamón pongo una cara seria con la ceja levantada. O al contrario, una vez me pasó que veía a toda la gente corriendo y tumbándose, y mi música era super lenta.... super lenta. Fue muy bonito, yo en mi mundo lenta mientras afuera se deshacían. Un besote!