29.6.07
28.6.07
Sólo quiero la voz
Me enamoré una vez, a los 16 años. Odiaba a los hombres reales y había un caballero, en un cuento, que me parecía el del "blanco córcel". Aunque en realidad lo que conducía era un Peugeot 404 y estaba en un embotellamiento de regreso a París. Y estuvo ahí por meses. Después del ingeniero del Peugeot terminé por enamorarme de muchos tantos... e imaginar, sólo imaginar, que aquel capítulo siete de la Rayuela estaba escrito para mí. Ya sé que soy una cursi asquerosa. Y que el video no es lo más bueno del mundo. Pero es como ver el anuncio de la Seat que hay ahora en la tele - cuestión de cerrar los ojos y regodearse en los restos de Bélgica que cuelgan de sus palabras. Enjoy.
Otra vez pasándola bien
Peeero... también es cierto que me faltaron dos puntos para ser Magneto - que es un malo muy cool -.
Estoy aburrida.
27.6.07
Pregunta
Gracias por la atención a este aviso parroquial.
26.6.07
La nueva canción del inicio del verano
No sé que me gusta más, si el video o la canción. Sigo ocupadísima. Ja.
Actualización: Lo siento, es Regina Spektor, canción Fidelity, del disco "Begin to hope". Regina es neoyorquina y que yo esté clavada en su canción no tiene que ver con que el resto de la humanidad también la escuche por estos lares. Supongo que si eso realmente fuera la canción del verano, las cosas serían muy distintas, ja.
Más blogs para leer
- Cierra la puerta al salir - de Lilián
- La Vida es Mejor Debajo del Asiento - del Tonto Simón.
Ni conozco a sus dueños ni nada. Pero ah, cómo me reí.
Pues eso.
Turistas
25.6.07
Usa bloqueador solar
Esta es la versión original del texto que Mary Schmich publicó en el Chicago Tribune en 1997 al terminar las clases, como "Guía para el graduado". Se puede leer una versión en español aquí, el blog del Café Morgana. Quienes estén en Guadalajara, también podrán verlo escrito en las paredes del lugar, propiedad de unos amigos queridos. Lo que quisiera ahora es llenarme de esta claridad. Y lo guardo aquí también para saber que lo leí. Y supe - nuevamente - que existía.
Ladies and gentlemen of the class of '97:
Wear sunscreen.
If I could offer you only one tip for the future, sunscreen would be it. The long-term benefits of sunscreen have been proved by scientists, whereas the rest of my advice has no basis more reliable than my own meandering experience. I will dispense this advice now.
Enjoy the power and beauty of your youth. Oh, never mind. You will not understand the power and beauty of your youth until they've faded. But trust me, in 20 years, you'll look back at photos of yourself and recall in a way you can't grasp now how much possibility lay before you and how fabulous you really looked. You are not as fat as you imagine.
Don't worry about the future. Or worry, but know that worrying is as effective as trying to solve an algebra equation by chewing bubble gum. The real troubles in your life are apt to be things that never crossed your worried mind, the kind that lindside you at 4 p.m. on some idle Tuesday.
Do one thing every day that scares you.
Sing.
Don't be reckless with other people's hearts. Don't put up with people who are reckless with yours.
Floss.
Don't waste your time on jealousy. Sometimes you're ahead, sometimes you're behind. The race is long and, in the end, it's only with yourself.
Remember compliments you receive. Forget the insults. If you succeed in doing this, tell me how.
Keep your old love letters. Throw away your old bank statements.
Stretch.
Don't feel guilty if you don't know what you want to do with your life. The most interesting people I know didn't know at 22 what they wanted to do with their lives. Some of the most interesting 40-year-olds I know still don't.
Get plenty of calcium. Be kind to your knees. You'll miss them when they're gone.
Maybe you'll marry, maybe you won't. Maybe you'll have children, maybe you won't. Maybe you'll divorce at 40, maybe you'll dance the funky chicken on your 75th wedding anniversary. Whatever you do, don't congratulate yourself too much, or berate yourself either. Your choices are half chance. So are everybody else's.
Enjoy your body. Use it every way you can. Don't be afraid of it or of what other people think of it. It's the greatest instrument you'll ever own.
Dance, even if you have nowhere to do it but your living room.
Read the directions, even if you don't follow them.Do not read beauty magazines. They will only make you feel ugly.
Get to know your parents. You never know when they'll be gone for good. Be nice to your siblings. They're your best link to your past and the people most likely to stick with you in the future.
Understand that friends come and go, but with a precious few you should hold on. Work hard to bridge the gaps in geography and lifestyle, because the older you get, the more you need the people who knew you when you were young.
Live in New York City once, but leave before it makes you hard. Live in Northern California once, but leave before it makes you soft.
Travel.
Accept certain inalienable truths: Prices will rise. Politicians will philander. You, too, will get old. And when you do, you'll fantasize that when you were young, prices were reasonable, politicians were noble and children respected their elders.
Respect your elders.
Don't expect anyone else to support you. Maybe you have a trust fund. Maybe you'll have a wealthy spouse. But you never know when either one might run out.
Don't mess too much with your hair or by the time you're 40 it will look 85.
Be careful whose advice you buy, but be patient with those who supply it. Advice is a form of nostalgia. Dispensing it is a way of fishing the past from the disposal, wiping it off, painting over the ugly parts and recycling it for more than it's worth.
But trust me on the sunscreen.
21.6.07
La columna invitada, ja
ROSTOCK 2007
Las movilizaciones sociales no serán
retransmitidas en su televisor
(Título inspirado en la canción “The Revolution Will Not be Televised”, de Gill Scott-Heron.)
Vera-Cruz Montoto
Rostock.
Alemania
El pasado miércoles 6 de junio los jefes de estado de los siete países más ricos del mundo y Rusia llegan al balneario de Heiligendamm, noroeste de Alemania. Con el cambio climático como punto clave en la agenda de negociaciones, tanto EEUU como los países en vías de desarrollo que asisten en calidad de invitados, acuden a la cumbre con un fuerte rechazo hacia la propuesta europea de la canciller alemana Angela Merkel: Reducir en un 50% las emisiones de CO2 para el 2050 y el calentamiento global en dos grados. ¿Empieza la cumbre del G8?
Si intentamos recordar cuál fue la última reunión de los ocho países más ricos e influyentes del mundo, posiblemente pensaremos en Génova, en el 2001, donde los fuertes disturbios y, sobre todo, la muerte por disparos policiales del manifestante Carlo Giulliani, alcanzaron gran repercusión mediática.
A partir de entonces y hasta la cumbre de Gleneagles 2005 (Escocia) y S. Petersburgo 2006, el G8 optó por destinos menos conocidos y más inaccesibles: 2002 en Kananaskis (montañas de Canadá), 2003 en Evian-les-bains (Alpes franceses), 2004 en Sea Island (Florida).
Año 2007, Rostock (Alemania), en el área de Heiligendamm. Aeropuerto propio, a tres horas del de Berlín y a un poco más del de Hamburgo. Una de las mejores redes ferroviarias del mundo y excelente comunicación por carretera.
Resultado: 100.000 personas empiezan a actuar organizadamente bloqueando de manera efectiva la cumbre G8 desde el 2 hasta el 8 de junio. Ni los 100 millones de euros gastados en medidas de seguridad, ni una valla de alambre de espinos de 14 metros de longitud por 2,5 de altura, fueron capaces de pararlos.
Desde la cumbre de Birmingham (Inglaterra) en 1998, un fuerte movimento social anti-capitalista que aboga por una globalización que acabe con el actual reparto desproporcionado de la riqueza mundial, comienza a exigir soluciones a los representantes políticos de manera directa, dando cuenta de sus peticiones acudiendo a las reuniones de los principales jefes de estado y de gobierno.
En una sociedad empática, hipersensibilizada a las imágenes televisivas y estímulos emocionales, la retransmisión de una resistencia efectiva y organizada ante los jefes del mundo, puede ser considerada demasiado arriesgada.
Según teorías sociológicas como la Espiral del Silencio, de la alemana Noëlle Neuman, la mayoría de los individuos que perciben su opinión como disonante o no encuentran apoyo en su contexto más próximo, tenderán a no darla a conocer. Subyace bajo este tipo de comportamiento, según explica la socióloga, la imperante necesidad del ser humano de sentirse parte de la comunidad en la que se encuentra, aún a costa de sacrificar su opinión personal.
Llegados a este punto, la legitimidad de las opiniones es directamente proporcional al número de personas que las secundan. En junio de 2007, mediante el silenciamiento del éxito de las movilizaciones antiglobalización en Rostock, se establecieron trabas en la difusión de sus peligrosísimo mensaje: “Otro mundo es posible”.
Otro G8 fue posible
El viernes 1 de junio tendría lugar la primera asamblea de las aproximadamente 200 organizaciones sociales presentes en Rostock. El sábado 2 a las 12 del mediodía
parte la primera manifestación del movimiento anti-globalización desde la estación central de ferrocarriles.
Se producirán entonces fuertes enfrentamientos entre los manifestantes y los 16.000 policías y 1.100 soldados encargados de velar por el correcto desarrollo de la cumbre. Los disturbios desbordan toda previsión del gobierno alemán y 1.000 personas resultan heridas siendo casi la mitad -433- policías.
Según el Legal Team (el equipo de abogados del movimiento anti- globalización) en este encuentro habrá unos 200 detenidos, tres de ellos del Estado español. La mayoría serán puestos en libertad al día siguiente, entre ellos un joven madrileño. R. S. y A. V., zaragozanos, permanecerán en centros de detención junto a otras 20 personas hasta el miércoles 6 de junio. Los medios de comunicación españoles no se harán eco de esta noticia hasta el jueves 7 de junio, dando cuenta de la condena de 9 y 10 meses de cárcel para ambos manifestantes, dictada mediante la realización de juicios rápidos establecidos como protocolo de actuación por las autoridades alemanas ante las movilizaciones previstas en Rostock.
También el sábado 2, y mientras continuaban los disturbios, dio comienzo el festival musical Move Against G8. Este evento juntará en el puerto y en los campamentos Rostock y Redelich, artistas internacionales como Fermín Muguruza, Obrint Pas, Amparanoia, Chumbawamba o Asthmathic Lion Sound System.
En la noche del 2 al 3 de junio, activistas ecologistas destrozan 1 km² de cultivo transgénico próximo a Rostock en la víspera de la colorida manifestación del Día Global sobre la Agroecología, convocada por el movimiento campesino internacional La Via Campesina y a la que asistirán 80.000 personas. Iniciado por campesinos latinoamericanos en 1992, este movimiento está conformado actualmente por organizaciones de 56 países pertenecientes a 8 regiones: Europa, Este e Sureste de Asia, Sur de Asia, Norteamérica, Caribe, Centroamérica, Suramérica e África.
Para primera hora de la tarde, Greenpeace reune en el puerto más de 600 personas conformando un bánner humano con el mensaje “G8 ACT NOW” y una gigantesca pancarta: “STOP CLIMATIC CHANGE”.
Tras dos días de protestas, el 4 de julio la opinión pública alemana se muestra escandalizada ante la ola de violencia que se está produciendo en Rostock, una ciudad de apenas 200.000 habitantes, 14.000 de ellos estudiantes universitarios. Periódicos sensacionalistas como el Berlins Grösste Zeitug comenzarán a poner en duda la legitimidad de las fuerzas policiales desde sus portadas: “¿Qué estamos haciendo?”, “¿Es nuestra policía muy blanda?". El Bild, por su parte, catalogará los hechos de "Orgía de violencia en Rostock" y "Estallido de odios sangrientos”. Se producirá ese mismo día un sustancial incremento de efectivos policiales y cuerpos especiales antidisturbios, así como un cambio en las estrategias de control de los manifestantes. No obstante, tendrán lugar nuevos enfrentamientos e incluso cargas policiales en el interior de los trenes de cercanías.
Es el día de la Acción Global sobre Migraciones, y comienza a las ocho de la mañana con una concentración ante el edificio Sonnenblumenhaus, un antiguo centro de refugiados atacado por los nazis en el año 1992. A la una de la tarde la cita es una manifestación a favor de los derechos de los emigrantes. La policía la mantendrá estancada durante horas buscando el agotamiento de los manifestantes hasta que hacia las siete de la tarde tanto policías como organización dan por finalizada la marcha. Los manifestantes permanecerán parados, lo que dará lugar a nuevos momentos de tensión, dispersándose finalmente custodiados de cerca por numerosos efectivos policiales. Por aquel entonces aún faltaban dos días para la llegada de los líderes políticos al balneario de Heiligendamm.
Willkomen al campamento Rostock
Los miles de manifestantes anti-globalización desplazados hasta el área de Heligendamm se alojaron en los campamentos establecidos por organización. En el principal, el campamento Rostock, convivieron unas 6000 personas. En él tendrá lugar la organización de los diferentes grupos internacionales anti-globalización, siendo habitual verlos improvisando asambleas informativas alrededor de sus tiendas de campaña.
La entrada aparecía custodiada por dos torres de madera similares a los puestos de vigilancia de los campamentos romanos en los comics de Asterix. Desde lo más alto se llevó un control ininterrumpido de los alrededores mientras hasta siete helicópteros y aviones militares se cruzaban en el cielo de la, hasta el momento, tranquila villa de Rostock. Los caminos que estructuraban la colocación de las tiendas estaban significativamente dedicados: la calle del anarquista Durruti, la avenida del manifestante Carlo Giulliani…
El campamento Rostock aportó las infraestructuras básicas para la supervivencia a lo largo de los seis días de contra-cumbre: agua, luz, cantina, aseos públicos, botiquín de primeros auxilios… Pero también una pequeña carpa con unos 10 ordenadores conectados permanentemente Internet, el Legal Team –cuyo número de teléfono pronto apareció rotulado en los brazos de los manifestantes, conscientes de la inminencia de las detenciones masivas-, uno de los dos centros neurálgicos informativos de Indymedia en la zona - cuya sede de noticias en Génova fue polémicamente intervenida durante la contra cumbre del 2001- dos carpas de circo para la realización asambleas y acogida de manifestantes, y los puestos de organización y coordinación de las actividades, de las cuales se da cuenta diariamente publicándolas en tablones informativos.
Banderas, pancartas y decenas de carteles completaron el campamentos Rostock. Entre ellos, uno recordaba: en caso de que se produzca la entrada de fuerzas policiales, “Please, wake up and help”.
Attac
De los cientos de organizaciones presentes en Rostock, Greenpeace y Attac se distinguieron por su efectividad y amplio respaldo social. Tanto que incluso se las llegó a acusar de realizar marketing político.
Pese a que en el Estado español nos encontramos más familiarizadas con la organización ecologista Greenpeace, la Asociación por la Tasación de las Transacciones y por la Ayuda a los Ciudadanos, Attac, constituye en la actualidad el movimiento social “revelación de la temporada”, disculpando la frivolidad.
En diciembre de 1997, el director del prestigioso periódico francés Le Monde Diplomatique, el pontevedrés Ignacio Ramonet, promueve en su editorial la aplicación de una tasa a las acciones financieras internacionales (la tasa Tobin) con el fin de restringir la volatilidad de los mercados de capitales, solicitando la creación de un grupo de presión que actuase públicamente a favor de la misma.
El 3 de junio de 1998 se constituye Attac, presidido en Francia por Bernard Cassen, subdirector de Le Monde Diplomatique, y con la presencia numerosos intelectuales franceses. En la actualidad está presente la mayoría de los países de Europa occidental, y en un importante número de países africanos y sudamericanos, contando además entre sus miembros con reconocidos intelectuales como Noam Chomsky.
Attac se autodefine como "un movimiento internacional de los ciudadanos por el control democrático de los mercados financieros y sus instituciones" entre sus objetivos destaca el establecer mecanismos democráticos de regulación y control de los mercados y del sistema financiero internacional.Como señala el propio movimiento, uno de sus compromisos principales es impulsar y fortalecer una opinión pública mundial independiente, activa y bien informada, conformando un movimiento de acción popular orientado hacia la acción.
20.6.07
Mensajes y manzanas.
And I went crazy again today, looking for a strand to climb
Looking for a little hope
Baby said he couldn't stay, wouldn't put his lips to mine,
And a fail to kiss is a fail to cope
I said, 'Honey, I don't feel so good, don't feel justified
Come on put a little love here in my void,' he said
'It's all in your head,' and I said, 'So's everything'
But he didn't get it I thought he was a man
But he was just a little boy
Hunger hurts, and I want him so bad, oh it kills
'Cause I know I'm a mess he don't wanna clean up
I got to fold 'cause these hands are too shaky to hold
Hunger hurts, but starving works, when it costs too much to love
18.6.07
Fin de semana en Italia - en píldoras
Barcelona
- Toda la comida se ve igual de mala y de cara en el aeropuerto. Mi recién estrenada - y seguramente fugaz- dieta no me permite alimentarme de chocolates. Una pena. Ya comeré algo al llegar a Padova.
- Cinco horas de retraso de un vuelo son muchas... ¿qué me esperará a la vuelta?
- Hace dos años que me fuí a visitar a Bere llegué 10 horas más tarde de lo esperado. Qué susto una reedición de aquello.
- El clon de Jorge Acosta es un italiano con polo azul marino que volará conmigo a Venecia. Si es que llega el avión.
- Hay un oficial de inmigración que es la encarnación verdadera y única del croissant (aquel que hace mucho ejercicio y le quedan los bracitos hinchados y doblados hacia adentro, como de croissant). Tiene una mala leche que asusta. A él le gusta (o le toca) revisar a los ciudadanos españoles. Si a ellos los trata mal, ni qué decir a los otros...
- Estuve caminando durante más de dos horas sin parar de un lado a otro del aeropuerto. Estoy cansada. En una de esas, me encontré con el Croissant en un pasillo lejos de su puesto. Creo que me reconoció como merodeadora y me miró feo. Uy. Creo que estoy paranoide.
- Si a mí me tuviera que pasar aquello de La Terminal, espero por favor que no sea en este aeropuerto. Encima de todo es pequeño y no tiene sillas cómodas.
- Es viernes y todo se mueve aquí adentro: sobre todo ahora, después de las seis de la tarde. Parece como si todos quisieran volver a casa o irse rápido, lejos.
- Toda esa gente con las laptops prendidas y conectadas al wifi... ¿estarán trabajando? ¿cuántos estarán teniendo cibersexo? ¿y haciendo transacciones ilegales aprovechando el IP del aeropuerto?
- Uno se puede comprar una revista de moda con una muestra de perfume y una cartera metálica de regalo por 2€. Eso es menos que el bocadillo más barato que venden en las cafeterías de este lugar.
- Nos llevan en un carrito hasta un avión absolutamente blanco por fura. Nunca había volado en un avión desnudo, por lo menos no que recuerdo. Me pareció raro. Fue como no tener "nametag" en una reunión de exalumnos. O fingir ser un vuelo secreto de la CIA. Pero nosotros no íbamos a Guantánamo.
- Después de más de cinco horas de retraso, me ofrecen a bordo algo que beber y unas galletas saladas. ¿Por qué será que siempre olvido que existe el Chinotto hasta que lo veo?
MCE - Aeropuerto Marco Polo de Tessera, Venecia
- Llegamos a Venecia con casi siete horas de retraso. Al estacionar el avión, un grupo grande hombres que iban a Nápoles a ver un partido de futbol se revelaron y no querían bajar. Argumentaban que querían algo en compensación, ya que el partido habría acabado para su hora de llegada.
- Entre los del futbol y los errores para acoplar la escalera a la puerta, salí justo cinco minutos después de que se fuera mi autobús. El siguiente sale una hora y media después.
- En el aeropuerto hay dos máquinas - una de café y otra de refrescos y galletas - que sólo funcionan entre las 22.30 y las 8.00 horas, que es cuando todo lo demás está cerrado. Me compré un capuccino con chocolate. Para las doce de la noche - fin del día ortodoxo - mi dieta había consistido en:
1 Café con leche
1 huevo revuelto con ketchup
1 trozo de pan
1 cocacola zero muy frìa
Varios chicles de menta
1 botella pequeña de agua
1 paleta magnum de almendras
1 bolsa de palitos de pan con ajonjolí
1 sobre de galletas saladas
1 vaso de chinotto
1 dulce de café
1 capuccino con chocolate valorado en 0.50€.
Cero salud. Y seguro el conjunto sumaba más de las calorías recomendadas en cualquier dieta.
- Llegué a Padova después de la una. Corinne me esperaba con Paride, que nos recibió en su casa. Me dieron un plato de pasta con vegetales y un vaso de vino. Dormí como una bendita.
Sábado - artístico
- Nos levantamos a las siete. Desayunamos café con tostadas. Paride nos llevó medio dormido a la estación donde salimos hacia Venecia. Qué emoción.
- La mamá de Paride le había explicado a Corinne cómo podíamos entrar a la Biennale sin pagar al pasar por una parte de los jardines. Buscamos la entrada "de los venecianos", pero no la encontramos. Dispuestas a pagar el precio del boleto, el chico de la taquilla nos cobró el precio reducido. Encantadas, pagamos sin chistar.
- Entramos a las diez y diez de la mañana. Recorrimos pabellones y casi todos los Giardini. Me sorprendió el gasto terrible de algunas representaciones - la francesa, por ejemplo - en poner cosas sin mayor trascendencia que un gasto estratosférico. Me gustó el pabellón Rumano, el Húngaro, el de los Países Bajos y la selección del italiano. Hacia medio día nos fuimos al Arsenale, la segunda sede. Por más que no íbamos haciendo la visita consultiva, nos corrieron sin haber podido terminar. Una tristeza. Tomé menos fotos de las queridas. Pero lo tengo todo en mi cabeza. Y algunos de los grafittis de Dan Perjovschi felizmente en mi Flickr.
- Al salir, exhaustas, entramos en un baccara, un bar local, a beber vino. Había un grupo de italianos muy bebidos, muy gritones. Eventualmente nos convertimos en el blanco del más borracho de ellos. Estuvo diciendo tonterías - afortunadamente yo entendía la mitad - hasta que los compañeros se apiadaron de él y de nosotros y se fueron, llevándoselo y pidiendo perdón. El bar, fuera del circuito turístico principal, era de lo más mono. Los dueños también se disculparon regalándonos un par de copas de vino. Querían seguir sirviéndonos pero habíamos comprado un boleto doble del vapporetto y no podíamos arriesgarnos a no utilizarlo. Salimos corriendo.
- Regresamos a Peruggia sobre las 11. No tuvimos ánimos ni para cenar, de tan cansadas. Dormí mejor que en años. Y estaba tan contenta.
Domingo: local
- Nos levantamos temprano para despedir a Paride, que se iba a Peruggia. Se tardó en irse. Nos llevó a la estación y dejamos ahí las cosas. El tipo de bagagglio era el ser más grosero de la historia. Pero nos recuperamos.
- Teníamos hambre pero toda Padova parecía estar tomando unos aperitivos bastante poco apetitosos. Acabamos comiéndonos la pizza más dura de la historia y una cerveza. Ah, pero el hambre es el hambre.
- Luego nos comimos los helados más buenos. Puro karma cósmico.
- Caminamos hasta la piazza de Padova, que según el papá de Paride es más grande que el Zócalo. No, no es más grande. Es bonita, eso sí. Y se puede uno acostar bajo los árboles. Y ver las chácharas del mercadillo dominguero. Pero no es más grande que el Zócalo.
- Las dos basilicas de Padova, la de Santa Justina y la de San Antonio son muy bonitas, con un tinte sincrético y ortodoxo. Me gustaron. Son sitios pacíficos.
- ¡Tienen en exposición la lengua de San Antonio como reliquia! What the heck!
- Hay muchas personas como indias o pakistaníes adorando al Santo. ¿Serán conversos?
- Tomamos fotos. Estamos cansadas. Hay una súper tienda de souvenires. Descubro que también aquí - como La Villa, como Montserrat - es un parque temático de la fé.
- Nos bebemos un spritz en una enoteca recién abierta. El dueño lleva una camiseta de Cancún y tuvo alguna vez un socio de Guadalajara. Qué cosas tiene la vida.
- Caminamos y caminamos y nos morimos de sed. Padova está muerta. Hablamos del consumo responsable, de los hombres, de los libros. La extrañaba tanto. La extrañaré tanto cuando la deje en unas horas.
- Buscamos boletos de tren para ella. Se fue el último y tendrá que esperar hasta las doce. Me sabe muy mal. Me acompaña hasta la estación de autobuses. Seguimos cargando unos omnipresentes posters que nos regalaron en la Biennale y que ya están más maltratados que nada. "ilimited edition", decían.
- Dejé Padova con la garganta rasposa: una mezcla justa entre el calor apoltronado en el autobús, las ganas dellorar y la sed que venía cargando desde hacía rato. En realidad, en Padova hicimos un puente. Hubiera sido más difícil despedirnos de Venecia y en Venecia. Le dije a Corinne lo mucho que la quiero cuando arrancó el autobús, gesticulando y llevándome las manos al corazon. Siempre he leido que los hombres se burlan de que las mujeres no sabemos estar calladas entre nosotras. Con ella puedo estar callada, tirada en el pasto, caminando por algún sitio, durante horas. Ahora Venecia tendrá también su cara y su risa.
- El autobús me lleva a Venecia. Veo los turistas. Sigo sola con el conductor hasta Tessera. Es uno de los aeropuertos más bonitos que conozco.
- Desde que llegué, el vuelo estaba retrasado. Lo tomé con filosofía. Saqué mi pase de abordar, me pasée por las tiendas, fui al baño, compré cosas para llevar a casa, vi las tiendas cerrar, curiosee a ver si me comía algo. La salida se retrasó dos horas y media. En contraste con lo del viernes, era ganancia.
- Lo último que me comí antes de subirme al avión fue una bolsa de fritos. Descubrí que en la parte posterior estaban anunciados todos los tipos de aperitivos de la marca con una rima cada uno. Guardé la bolsa. Ya la escanearé para ponerla aquí.
- El avión tenía mal el sistema de sonido: sonaban demasiado fuerte los bajos. Pero insistían en poner una versión mezclada en plan easylistening de Maroon 5 (She will be loved) con una pieza de jazz latino. Increíblemente, casaban. No tan increíblemente, sonaba horrible. Todos suspiramos con alivio cuando lo quitaron.
- Llegué a Barcelona a tiempo para tomar el último autobús. Me costó casi lo mismo que el autobús del MCE a Padova, que es una hora de camino. Me dio rabia. Llegué a casa casi a las dos de la mañana. Me pregunto cómo le habrá ido a Corinne con su tren nocturno.
14.6.07
Oficios de alto riesgo
Esto me da pie a una reflexión que estuve leyendo ayer en el periódico, ilustrada por Bill Waterson y protagonizada por Calvin y Hobbes. No es justamente sobre la decadencia moral de la que hablo en el párrafo anterior - sí, y eso que en México no es legal portar armas - sino sobre la corrupción generalizada de la vida en función de lo urgente y no de lo importante. No pretendo ser irrespetuosa al reunir la nota de la muerte de la profesora con esto. Sólo entiendo que las cosas van mal, de muchas maneras.
8.6.07
La realidad siempre supera a la ficción
El poco discreto encanto de ser una gorrona
Fuí a conocer a B, una chica que me ha ayudado en algunos de los procesos de la homologación del título. Estaba con un amigo suyo, en una cafetería monísima. Hacia calor. Pedimos una botella de vino rosado, fresco. Risas, muchas risas. Me dijeron que tenían una reservación para cenar y que me habían incluido. Yo tenía un concierto a las diez - oficialmente - pero asumí que alcanzaba a cenar. Pedimos la cuenta y la pagó él. "Yo invito". Caray, gracias, pensé y dije. Pero no termina ahí. Fuimos a un restaurante monísimo en la parte más vieja de Barcelona, los tres más el novio de B y otros amigos. Comimos perfecto. Todo iba muy bien - más risas - cuando me mandaron un mensaje de que tenía que irme al otro compromiso ya aceptado. Quise escabullirme... y no tenía dinero en efectivo. Pregunté si iba al cajero o qué. Todos dijeron que lo cobrarán con una cerveza en casa, que no me preocupe. Yo sí me preocupo, pero es lo que hay.
Luego, pagué la entrada al concierto pero ya no llegué a las cervezas - que me las pagó L - era su cumple y fue conmigo y todo. Al salir del concierto, de regreso a casa, también nos comimos un helado... doble y todo.
Hoy amanecí sintiéndome un poco culpable. ¿Será que debo disfrutar más sin preocuparme tanto? Saaabe.
No me ayude, compadre
7.6.07
Pertenecer o no
5.6.07
Postales de nostalgia
- Por la calle Sant Pere Mes Alt usualmente hay muchas motocicletas estacionadas. Hoy, en una vieja Vespa, alguien había escrito con lápiz labial en el redondo retrovisor "Te extraño, Pep".
- En las escaleras del metro, M., que acaba de ver morir a su abuela de cáncer, me contó que está harta que la gente la detenga en la calle y le cuente durante 20 minutos todo lo maravillosa que era. Y siguen y siguen, a pesar de que ella esté llorando. "Yo creo que hay quien disfruta con eso", dice. Estoy convencida.
- En el messenger, alguien me dice "es que yo quiero verlos más enamorados que el día que se casaron". Sin comentarios.
4.6.07
Falso festivo
No tengo muchas ganas de escribir. Lo hice por "disciplina", pero creo que ya me voy. Algo se me ocurrirá después.