17.10.13

Aniversario

Esto no es una declaración de amor. Es una confirmación de amor.
Lo nuestro, pongámoslo así, fue un matrimonio de conveniencia. Más o menos algo sabía yo de ella, pero no estaba convencida de que fuera lo mejor para mi. Sin embargo, fríamente, había algo de conveniente en estar ahí/aquí. Y por eso vine.
Lo extraño es que parece que fue ayer. Lo extraño es que, cuando miro las fotografías, las agendas, los calendarios, sé que han pasado ya nueve años. Nueve. Y nos hemos aguantado. Yo he ido y venido. Ella se queda aquí, siempre, cambiante, majestuosa a ratos, farragosa a otros.
Decía Sabines que "los amorosos se ríen de los que creen en el amor como en una lámpara de inagotable aceite". Ella y yo sabemos que nuestro amor es más delicado que los narcisos de primavera. Que es frágil y se rompe. Se ha vaciado tantas veces de aceite esa lámpara... Nos hemos peleado tantas veces... Yo me he ido tantas veces... Y sin embargo, al volver, al mirar su geografía desde la ventana del avión más de una vez se me han saltado las lágrimas. Como volver a mirar un cuerpo y decir: "te reconozco. Y en cada imperfección de tu cuerpo, en cada falta, también te amo. En cada momento que hemos estado separadas, peleadas, hartas la una de la otra, te amo".
Me quejaría de que no dice nada. Pero no es verdad. Ella me habla, todos los días. A veces, cuando estoy receptiva, escucho sus quejas o sus mimos. Y lo cierto es que aquí, bajo sus brazos, bajo su cielo protector, me sigo construyendo. Me descubro cada día quien soy - quizá un poco más fuerte, un poco más vieja, ojalá un poco más sabia.
No tengo verguenza frente a ella. Lloro sin angustias en sus calles, en su frente marítimo, en sus rincones. Igualmente me carcajeo, como con la boca abierta, me tiendo a dormir en sus parques mullidos bajo su luz tamizada de nubes. Y así, en silencio, nos abrazamos y nos sentimos un poco más la una de la otra. Agradecemos - yo agradezco - la bendita coincidencia, el matrimonio de conveniencia que me trajo hasta aquí.

Feliç Aniversari, Barcelona. T'estimo como només a tu podria estimar-te.

No hay comentarios.: