14.6.14

Un poco de drama

Una de las razones por las que no soy muy afecta a ver el fútbol, honestamente, son los gritos de los comentaristas. Siempre parece que tienen toda la razón, y a veces cambian completamente el sentido del partido. Si uno es como yo, no un experto, es difícil seguir el juego sin sentirse medio estafado por algunos gritos. Ahora, en Bulgaria, donde no entiendo nada - ni los letreros en las calles, que están en cirílico - estoy en mi salsa. Puedo ver el fútbol sin demasiadas exquisiteces técnicas pero tampoco con excesos líricos.

Aunque, reconozco, hay un momento donde es divertido escuchar a los comentaristas: ayer, por ejemplo, fue portentoso escuchar a los comentaristas de la televisión española de ser "los mejores del mundo", a "esto es horrible", pasando por "es que hace mucho calor", para terminar en "es un desastre de proporciones épicas".

Supongo que casi a todo le viene bien un poco de drama.

No hay comentarios.: