Y me quejo en Facebook. Y Juan Carlos, ese cronopio, me manda un salud. Doy las gracias. Y luego dice que me manda un pañuelo... o toda la caja. Y entonces yo escribo esta respuesta.
Cin se encuentra con una caja de pañuelos nueva y no sabe qué hacer. Primero, agita las manitas con emoción. Luego la mira por todos los lados y descubre que tiene una flor morada y la abraza, de puro gusto. La abraza tanto que se aplasta. Intentando salvarla, saca todos los pañuelos y se da cuenta de que, sobre su cama, ha caído una especie de suave nieve de celulosa. Mira por dónde: es un poquito más feliz.
(Sí, ya sé que es autoplagio. Pero era divertido)
2 comentarios:
o que hasta la alergia nos puede traer algo bueno. le mando abrazos
Oh, qué bonito :)
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