9.12.10

El derecho a olvidar

Con el asunto wikileaks escurriendo por todas partes, me imagino en estos días a un grupo más bien grande de diplomáticos y empleados gubernamentales llorando por los rincones, preguntándose por qué hicieron todo lo que hicieron y, peor, lo pusieron por escrito y, aún peor, lo mandaron por internet (en algunos casos).

Me imagino el susto de que alguien ahora reuniera todos los posibles archivos de las computadoras de mi vida y comenzara a rastrear algo que me incriminara. Claro, yo no manejo dinero público ni soy cargo de elección popular, pero hay cosas que he dicho y hecho que muy probablemente no me gustaría que salieran a la luz.

Y pienso entonces en el rastro digital tremendo que vamos dejando ahora en Facebook, en Twitter, en Blogger. En este blog hay una especie de cuaderno evolutivo de Cinthya que permite - por lo menos para mí misma - entender cómo y por qué se han hecho ciertas cosas, se han roto ciertos castillos y se han conquistado nuevos reinos. Supongo que - casi - no me avergüenzo de él, que he llegado a un punto de reconciliación conmigo misma.

Pero también reconozco que hay cosas que no existen en mi vida digital - que me doy el derecho a guardarme para mí misma: no sólo a borrarlas de mi vida. Como los que ya no son nuestros amigos (digitales), las fotos que borramos en un intento para hacer borrón y cuenta nueva...

Hablamos los que trabajamos en la investigación de las redes sobre el derecho a olvidar. ¿cuándo, dónde, cómo a quién? Pensemos en Wikileaks... y en los leaks que de pronto, en la vida real nos recuerdan que no todo estaba olvidado.

2 comentarios:

foreign citizen dijo...

me confieso ser de esos sujetillos sin capacidad de perdonarme a mi mismo en ocasiones. es curioso que el registro digital, gráfico o acaso escrito, son solamente huellas de lo que realmente camina.
el saco no es necesariamente pesado, mucho menos cuando con levedad se llena. si hay cosas (la mayoría de ellas) que no quedan sino remanentes cuando se les desentierra.
si yo tuviera mi propio wikileaks, vaya, me llevaría otra vida analizar cosa por cosa y acaso hallarle el hilo.
no, no creo que haya quien realmente sufra en el gobierno por lo que alli fue hallado, quizás esto también es parte de ello. (seguro hay otro lugar a donde voltear mientras todos miramos allí)

Gus Zuppa dijo...

Interesante... por un momento cruzó por mi cabeza una maraña de ceros y unos que como átomos primigenios se dividían y unían una y otra vez hasta formar esa fotografía que subí hace como cinco años y que pretendí haberla olvidado...la vida cibernética combinada con la vida real es confusa y peligrosa